Jack Herer

JACK HERER: UNA POTENTE CLÁSICA QUE SIGUE EN FORMA

Jack Herer fue posiblemente el defensor más importante del cáñamo y el activista a favor de la despenalización del cannabis más prolífico de nuestros tiempos. Tristemente, en 2010 falleció debido a las complicaciones generadas por un ataque al corazón, y toda la comunidad mundial del cannabis se encendió un porro a la vez en su honor.

Jack creía que el cáñamo salvaría al mundo, y sería justo que se crease una cepa de cannabis para garantizar que su legado no muera jamás. Adorábamos a Jack tanto como adoramos esta variedad, un merecido tributo que se ha hecho famoso por sí mismo y quizás sea ahora tan conocido como el hombre en honor del cual fue bautizada.

Esta variedad está ahora disponible en todo el mundo, desde California a Amsterdam, y más allá. Habiendo ganado la Cannabis Cup en unas asombrosas catorce ocasiones, sin duda hace honor a su nombre como una de las mejores variedades de todos los tiempos, por lo que hemos decidido que debería incluirse en nuestro Salón de la Fama.

Originariamente creada en Holanda en los años 90, el objetivo era conseguir una planta que ofreciese el efecto animado que se suele asociar con las variedades Haze, pero con un plazo de floración más corto.

Los genes exactos de la Jack Herer son un secreto muy bien guardado y, en cierto modo, un poco misteriosos, pero se cree que es un cruce de Haze al 50% con algo de Northern Lights y Skunk. Todas estas cepas son míticas y potentes por sí mismas.

AROMA, SABOR Y EFECTOS DE LA JACK HERER

La Jack Herer produce cogollos de gran calidad, densos y de color verde pálido, con estigmas de tonos ámbar. Esta variedad está siempre cubierta de tricomas llenos de resina y terpenoides.

Al romper sus cogollos tu olfato recibirá un aroma picante pero dulce. Es delicioso y único, con toques a caramelo y canela. Fúmate un porro y podrás paladear el característico sabor a pino de esta variedad, mientras al exhalar un regusto fresco y tropical suaviza tu garganta.

La Jack Herer es una híbrida ligeramente sativa dominante, que proporciona un efecto cerebral muy lúcido con una fuerte inyección de energía típico de las índica al mismo tiempo. El colocón resultante de esta variedad es eufórico y vigorizante, a un nivel superior al de muchas sativas.

La Jack Herer es una de las mejores formas de empezar el día, sus cualidades energéticas son geniales para sentirse activo o hacer ejercicio, mientras los consumidores terapéuticos han comprobado la efectividad de esta planta para combatir muchos de sus síntomas.

Gracias a la herencia sativa de esta variedad, su consumo está más indicado para el tratamiento de trastornos psicológicos, como la depresión, el estrés y la ansiedad. No es de extrañar que la Jack Herer haya recibido tantos galardones hasta la actualidad, y que sea considerada una de las cepas más apreciadas en todo el mundo.

CÓMO CULTIVAR JACK HERER

La Jack es una planta bastante flexible que permitirá que incluso cultivadores novatos puedan producir buena hierba sin demasiado esfuerzo, pero se desarrolla mejor en manos de un cultivador experimentado.

La herencia genética de esta variedad le otorga una producción rápida, que junto con su brutal potencia hace de la Jack Herer una opción prioritaria para cultivadores privados y comerciales.

Cuando se cultivan con cuidado y atención, las plantas de interior pueden llegar a rozar los dos metros de estatura, floreciendo en un período de 8-10 semanas.

Se comporta bien con métodos SOG o ScrOG, pero esta variedad destaca fundamentalmente cuando se planta en exterior en tierra, con espacio suficiente y permitiendo un par de semanas adicionales para un desarrollo radicular más completo. Un ejemplar de Jack Herer maduro y cultivado de esta forma es una bestia increíble ¡que puede superar los 2,5m y producir unos espectaculares 500-600g/m²!