Purple Afghan Kush

PURPLE AFGHAN KUSH: UN CLÁSICO SABROSO Y RELAJANTE

¿Qué obtienes cuando cruzas dos cepas clásicas como la Purple Kush y una Bubba Kush anterior a 1998? Un prodigio violeta llamado Purple Afghan Kush. La Purple Afghan Kush es igual de atractiva que relajante. Esta cepa produce tonalidades moradas y azul oscuro de forma natural, y no se debe a la temperatura, sino a su combinación de genes específica. La Purple Afghan Kush es una cepa índica dominante, cuyo linaje y color característico la han convertido en una alternativa muy popular entre los aficionados al cannabis.

Esta híbrida procede de la mítica región del Triángulo Esmeralda, en el norte de California, una zona que recibe su nombre por ser una de las mayores productoras de cannabis en los Estados Unidos y, probablemente, del mundo. Aunque no se trata de una índica pura, suele contener una proporción 80/20 en la mayoría de sus fenotipos, y tiene todas las cualidades que cabría esperar de ella. Relajante, calmante y con un sabor increíblemente afrutado, la Purple Afghan Kush llamará la atención de tus colegas por su impresionante color, potencia y deliciosos sabores.

AROMA, SABOR Y EFECTO DE LA PURPLE AFGHAN KUSH

El aroma dulce y afrutado que desprende la Purple Afghan Kush combina a la perfección con los efectos increíblemente calmantes y tranquilizantes que produce al consumirla. Algo en lo que todo el mundo estará de acuerdo es la composición de terpenos completamente afrutada de esta variedad. En lo que no todo el mundo estará de acuerdo es en la fruta concreta que le da sabor. Algunos dicen que es la piña, otros las uvas y otros dicen que las manzanas de antiguamente. En cualquier caso, si te apasionan los aromas y sabores dulces, la Purple Afghan Kush puede ser ideal para ti.

Las índicas tienen fama de ser la marihuana escogida por los fumetas que buscan efectos relajantes. Esta cepa en particular cumple perfectamente con el estereotipo de las índica, con un gran colocón corporal y un efecto cerebral más relajante. Yo no intentaría correr una maratón después de haber probado la Purple Afghan Kush.

Lo más probable es que quieras mecerte en una hamaca o dormitar mientras escuchas música. El contenido de THC se sitúa entre el 15 y el 21 por ciento, y aunque no produce grandes cantidades de CBD, con aproximadamente un 1-1,5%, presenta un equilibrio de cannabinoides perfecto para aliviar cualquier dolencia que sufras.

Como con muchas otras índicas, los consumidores han descubierto que la Purple Afghan Kush es una gran alternativa al consumo de fármacos para calmar sus dolores y molestias. La Purple Afghan Kush es una de esas variedades que proporcionan cualidades increíblemente poderosas. Muchos pacientes utilizan esta cepa para sobrellevar una serie de dolencias crónicas, como espasmos musculares, náuseas y los dolores de la artritis.

Otra propiedad increíble de la Purple Afghan Kush, es su contenido de CBN o cannabinol superior a la media. El efecto principal del CBN sobre el cuerpo es la relajación muscular. Además, es genial para calmar la ansiedad, lo que convierte a la Purple Afghan Kush en una variedad perfecta para quienes quieran sentirse colocados sin tener que experimentar ningún tipo de sensación de agobio.

CÓMO CULTIVAR PURPLE AFGHAN KUSH

Antes de nada, conviene mencionar que la Purple Afghan Kush está acostumbrada a desarrollarse en condiciones más secas y calurosas de lo normal. Si te preocupa el riesgo de regar en exceso, asegúrate de añadir perlita a tu sustrato, para que lo mantenga ligeramente más seco.

Al ser originaria de climas áridos, deberás mantener niveles de humedad reducidos, ya que sin duda un ambiente muy húmedo limitará a tus plantas y su desarrollo. No es una variedad especialmente complicada de cultivar, pero vigilar los aspectos fundamentales del entorno es imprescindible. Si recibe los cuidados adecuados, la Purple Afghan Kush puede producir cosechas de hasta 500 gramos por metro cuadrado, o de 800 gramos por planta en exterior.

Puedes cultivar Purple Afghan Kush en exterior o en un invernadero, sin embargo, si lo haces tendrás que asegurarte de no regar en exceso ni dejar que el tiempo afecte demasiado a tu cultivo. Lo más seguro es intentarlo en interior, donde puedes controlar y ajustar mejor el ambiente para satisfacer las necesidades de esta planta.

La Purple Afghan Kush no crece demasiado alta, quedándose normalmente en un metro de estatura cuando se cultiva en interior. Ha demostrado adaptarse muy bien en términos de altura a su entorno. Por eso en exterior puede alcanzar los 2 metros. Tiene tendencia a mostrar su frondosidad, especialmente si se practican varias podas apicales.

Los cogollos tienen un color verde oscuro en las primeras semanas de la fase de floración, aunque perderán clorofila y adoptarán sus típicos colores morados a medida que se acerca la cosecha. Los cogollos a lo largo de su tallo central no formarán una única cola compacta, sino que estarán espaciados entre los nodos, recordando a variedades como la Girl Scout Cookie y similares.

PURPLE AFGHAN KUSH EN LOS CONCURSOS

La Purple Afghan Kush de Dinafem Seeds se llevó el primer premio a la "Mejor Índica" en el Expogrow de 2015. También consiguió el segundo premio en la Copa Mega Cata Invernal MF 2015 y el tercer puesto en plantas indoor en la Spannabis Málaga de 2015. En 2016, recibió el tercer premio en la Cannazores Cup, pero puedes estar seguro de que no será el último que la Purple Afghan Kush reciba, ya que sigue arrasando en el mundo del cannabis.