Blackwater

Blackwater: oscura y eufórica

Probablemente nunca habrás oído decir que una planta de marihuana tiene un “aspecto siniestro”. Pero en el caso de la relajante Blackwater, esta descripción encaja a la perfección. Esto es debido a que sus cogollos pueden volverse de un color casi negruzco, especialmente si se exponen a las temperaturas adecuadas. Normalmente, sus cogollos tienen un matiz púrpura que puede atribuirse a sus variedades parentales: la Mendo Purps y la San Fernando Valley OG Kush. La Blackwater es una índica potente, que es mejor consumir por la noche, cuando el cuerpo se relaja para dormir. Está cargada con un 18% de THC, por lo que no hay que tomársela a la ligera. Esta variedad ganó el tercer puesto como “Mejor Índica” en la High Times Medical Cup de 2014 en Los Ángeles, así que, si eliges la Blackwater, sabrás que has tomado una decisión de alta calidad.

Aroma, sabor y efecto de la Blackwater: Afrutada y calmante

Fiel a sus raíces índicas, la Blackwater produce un colocón relajante, ideal para descansar tras un largo día de trabajo. Independientemente de cuándo o por qué consumas esta hierba, verás cómo te relaja de pies a cabeza. Su dulce aroma a uva es inconfundible. Este toque afrutado también se refleja en su sabor, junto con unos agradables matices a pino y tierra. Cuanto más la fumes, más te preguntarás cómo es posible que esta índica esté tan llena de sabor.

Cultivar Blackwater: Consigue grandes cosechas fácilmente

Cultivar la Blackwater es un proceso relativamente fácil y rápido, gracias a su robusta naturaleza índica. Tanto si la cultivas en interior como en exterior, podrás cosechar un montón de cogollos grandes y densos tras una floración de 8-9 semanas aproximadamente. Sus cogollos son un espectáculo para la vista, con tonos púrpuras que rozan el negro. Para conseguir estos matices, las plantas deben exponerse a unas temperaturas nocturnas ligeramente más frescas durante la fase de floración.