Afghan Kush
Afghan Kush: pura magia índica
La Afghan Kush es una variedad índica de cannabis que tiene su origen en la famosa región montañosa Hindu Kush, que se extiende a lo largo de la frontera entre Afganistán y Pakistán. Es reconocida por representar lo mejor del mundo de las índicas: grandes cosechas de cogollos resinosos, que producen ese colocón corporal icónico que tantos fumadores adoran.
Introducida en el mercado de la mano de bancos de semillas holandeses, esta variedad es un sueño para los amantes de las índica. La Afghan Kush produce el mítico colocón índico, caracterizado por una sensación de sedación profunda y una fuerte relajación física. Esto la convierte en la variedad perfecta para aquellos que quieran rebajar el ritmo después de un día largo y duro. Debido a sus fuertes efectos físicos, no es la mejor variedad para aquellos que quieran seguir siendo productivos. La Afghan Kush es conocida por hacer que la gente sienta felicidad, pereza, y mucha, mucha hambre. La concentración de THC media de esta variedad ronda el 17%.
Los fuertes efectos físicos de la Afghan Kush la hacen muy atractiva para los fumadores terapéuticos. Cualquiera que busque un alivio rápido y efectivo del dolor debería probar esta variedad. Los pacientes que sufren de insomnio, o de otros trastornos de sueño, suelen decantarse por esta variedad, como también hacen aquellos que simplemente quieran aliviar sus niveles de estrés.
La Afghan Kush alardea de un perfil aromático y de sabor único. Los sabores y aromas de esta variedad tienen un notable toque a madera y tierra, combinado con sutiles tonos especiados, casi herbales. Para algunos fumadores, el gusto es similar al del hachís, algo comprensible dado que la Afghan Kush tiene una larga historia en la elaboración de hachises tradicionales, como el Black Afghan y las charas.
Al igual que sus efectos, las características de crecimiento de esta planta son claramente índicas. Sus ejemplares presentan un tamaño medio, con espacio internodal corto y hojas anchas de color verde oscuro. Estas plantas suelen pegar un estirón durante la fase vegetativa hasta convertirse en frondosos arbustos. La Afghan Kush, como otras variedades índica, es conocida por sus grandes cosechas, que pueden llegar a 550g/m² en un cultivo de interior.
Los cogollos de esta cepa están cargados de resina, gracias a una generosa capa de tricomas escarchados. Normalmente tienen una apariencia verde oscura con unos ligeros toques de naranja, debido a la gran cantidad de pistilos.
Cultiva tu propia Afghan Kush
- Dificultad de cultivo
- Medio
- Tipo de floración
- Fotoperiodo
- Periodo de floración
- 6-8 semanas
- Época de cosecha (exterior)
- Finales de septiembre/octubre
- Producción en interior
- 550 g/m2
- Producción en exterior
- Medios
- Altura en Interior
- Medio
- Altura en exterior
- Medio