Cultivar cannabis en sustrato en interior


Cultivar cannabis en sustrato en interior
Max Sargent

Para los principiantes que quieran plantar marihuana en interior, la tierra es el sustrato más natural para empezar. Es un medio de cultivo fiable que ofrece grandes resultados. En este artículo veremos por qué la tierra es tan buena para cultivar marihuana, los distintos tipos de tierra y cómo mejorarlas, y cómo hacer tu propia mezcla de tierra.

Cuando pensamos en las plantas, es difícil no pensar también en la tierra. Y si alguna vez has pensado en plantar marihuana, probablemente habrás considerado un sustrato de tierra. La tierra es un medio de cultivo sencillo, barato y fácil de usar, y es el sustrato preferido por muchos cultivadores de marihuana.

En la siguiente guía, te explicamos los detalles del cultivo de marihuana en tierra en interior, incluidas sus ventajas y desventajas, los distintos tipos de tierra y productos para mejorarla, y cómo hacer tu propia mezcla de tierra. Incluso si nunca has cultivado marihuana en interior, puedes conseguir buenos resultados con poco más que unas semillas y tierra.

Aspectos básicos del cultivo de marihuana en tierra en interior

Para casi todos los cultivadores principiantes, y para muchos de nivel avanzado, la tierra es el sustrato preferido para plantar marihuana. Aunque existen otros métodos de cultivo, como la hidroponía, la naturaleza lleva usando la tierra para las plantas durante millones de años, y ha demostrado ser bastante fiable.

Una tierra de buena calidad contiene los nutrientes necesarios para que una plántula de cannabis salga de su cascarón. Además, la tierra de calidad tiene una buena aireación y drenaje, y es capaz de mantener un pH estable, lo que permite que las raíces absorban los nutrientes adecuadamente.

Cuando empieces tu cultivo interior, una de las primeras cosas que tendrás que hacer es elegir una maceta de tamaño adecuado. El volumen adecuado del tiesto dependerá de la variedad de cannabis, la técnica de cultivo, la ubicación y el espacio disponible. Pero recuerda: cuanto más grande sea la maceta, ¡más grande será la planta! También necesitarás unas luces de cultivo adecuadas, un sistema de ventilación y la propia tierra.

Pros y contras de cultivar marihuana en tierra en interior

Pros y contras de cultivar marihuana en tierra en interior

Cultivar marihuana en tierra definitivamente puede considerarse el método más sencillo. Si las condiciones son buenas, cultivar de esta forma puede ser tan fácil como cultivar cualquier otra planta de interior, ¡aunque los resultados serán más espectaculares! Sin embargo, la tierra también conlleva algunas desventajas.

Ventajas

  • Tolerante: la tierra actúa como un gran amortiguador, haciendo que los problemas de nutrientes o pH sean más fáciles de corregir, sin causar daños significativos a tus plantas.
  • Entorno hospitalario: la tierra es el hábitat natural de las plantas de cannabis, y por tanto las plantas pueden prosperar incluso en condiciones no ideales. No solo ofrece un entorno hospitalario para las raíces del cannabis, sino también para los microorganismos beneficiosos. La salud de la planta y la absorción de nutrientes pueden mejorar considerablemente con la presencia de bacterias y hongos beneficiosos que habitan en la tierra.
  • Es sencillo: aunque el cultivo en tierra puede volverse muy técnico, también puede ser excepcionalmente sencillo.
  • Movilidad: aunque no conviene mover demasiado las macetas, es posible moverlas de sitio, lo que te permite usar el espacio de cultivo de la mejor manera posible.
  • Barato (potencialmente): cultivar en tierra puede ser tener un coste muy bajo.
  • Buenos resultados: dada la afinidad entre el cannabis y la tierra, no es difícil lograr buenos resultados.
  • Ecológico (si quieres): es fácil cultivar en tierra de forma totalmente ecológica, si así lo prefieres.

Contras

  • Plagas: además de ofrecer un ambiente hospitalario para las plantas y los microorganismos beneficiosos, la tierra también puede albergar plagas. Sin embargo, si compras una tierra de buena calidad debería estar libre de plagas, patógenos o enfermedades.
  • Consume más agua: aunque parezca contradictorio, los cultivos en tierra utilizan más agua que los cultivos hidropónicos optimizados.
  • ¿Segunda mejor opción tras la hidroponía?: Se dice que los cultivos hidropónicos de marihuana pueden producir mejores resultados en general que los cultivos en tierra, aunque esto es un tema para el debate. Además, salvo que tengas experiencia, no merece la pena dedicar el tiempo y los recursos necesarios para hacer un cultivo hidropónico de alta eficiencia.
  • Ocupa espacio: las macetas con tierra ocupan mucho espacio, por lo que tendrás que destinar suficiente espacio a tus plantas.
  • Es caro: esto no se aplica específicamente al cultivo en tierra, pero plantar marihuana en interior puede ser caro. Hay que conseguir las luces LED, el armario de cultivo, los ventiladores, el fertilizante, etc. Al preparar tu cultivo, es importante elegir el material adecuado para ahorrar dinero.

¿La marihuana de interior es mejor o más potente que la de exterior?

La mayoría de cultivadores sueñan con producir unos cogollos excepcionalmente potentes, por lo que se preguntan qué entorno da los mejores resultados.

Realmente, no existe un consenso sobre si el cannabis de exterior o de interior es más potente, ya que depende de cómo se cultive. En exterior, bajo el sol, los cultivadores tienen la ventaja de disponer de una luz inmejorable (siempre y cuando haga buen tiempo), que a su vez puede promover la máxima potencia de tu cosecha de marihuana.

Dicho esto, un cultivo de interior suele ofrecer mucho más control. La temperatura, la humedad y el riego pueden controlarse para lograr grandes resultados. Así que, con un poco de esfuerzo y unas buenas luces de cultivo, puedes conseguir una hierba súper potente en interior.

En definitiva, la calidad y la potencia de los cogollos de interior dependen de factores ambientales, la habilidad del cultivador, si se han usado técnicas de entrenamiento, y otros factores.

¿Cuál es la mejor tierra para cultivar marihuana?

A la hora de elegir un sustrato para el cannabis, hay algunas cualidades generales a tener en cuenta. Para que tu cultivo tenga éxito, la mezcla de tierra que elijas debe tener las siguientes características:

  • Textura suelta (no compactada): esto permite la aireación y el drenaje, que son esenciales para la salud de las raíces del cannabis.
  • Retención de agua: podría parecer que esto contradice el punto anterior, pero se trata de hallar un equilibrio. Aunque no quieres que el agua se acumule y se estanque, debe retenerse la cantidad suficiente para que el sustrato se mantenga húmedo.
  • Nivel de pH ligeramente ácido: el pH óptimo para el cannabis cultivado en tierra ronda entre 6,0 y 7,0.
  • Textura rica: la tierra debe ser rica y con un color oscuro, en lugar de clara y arenosa.
  • Nutrientes: a no ser que hagas tu propia mezcla de "súper tierra", en algún momento tendrás que fertilizar tus plantas de marihuana. Sin embargo, una tierra de buena calidad debería contener suficientes nutrientes para alimentar tus plantas durante las primeras 3-4 semanas.

A continuación, detallamos los distintos tipos de tierra que puedes utilizar para preparar un sustrato para tus plantas de cannabis. Cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes, y de nuevo, se trata de encontrar el equilibrio.

Suelo arenoso

La tierra arenosa tiene una textura gruesa y ofrece un buen drenaje; a veces demasiado bueno. Además de no retener bien el agua, con este tipo de tierra es más fácil que los nutrientes sean arrastrados por el agua de escorrentía. Por otro lado, tiene una buena aireación, y el riesgo de problemas como la podredumbre de las raíces es mínimo. Además, tiene un pH ácido de forma natural.

La tierra arenosa, por sí sola, no es una buena opción para cultivar marihuana, pero puede ser un ingrediente viable en una mezcla de tierra. Mezclar tierra arenosa con un material como la vermiculita, que ayuda a retener el agua, puede mejorarla como sustrato de cultivo. Abajo encontrarás más información al respecto.

Suelo limoso

La tierra limosa es una buena opción, especialmente para los principiantes. Con un buen contenido de minerales, un drenaje moderado-bueno y una retención de agua decente, puede ser un gran hogar para tus plantas. Siempre y cuando no te pases con el riego y la fertilización, la tierra limosa es una excelente base para tu sustrato.

Suelo franco

Este tipo de tierra es ideal para cultivar cannabis y quizá sea la mejor opción. Al combinar arcilla, limo y arena, así como minerales y nutrientes añadidos, proporciona un hábitat casi ideal para las raíces de las plantas. ¿El inconveniente? Puede ser un poco caro.

Suelo arcilloso

Esta tierra está formada por partículas finas que dificultan el drenaje y la aireación, por lo que es bastante difícil trabajar con este tipo de tierra. Entonces, ¿por qué incluirla en la lista? Su alto contenido en minerales naturales la convierte en un gran ingrediente para quienes quieren cultivar de forma ecológica.

Cómo mejorar una mezcla de tierra para cultivar cannabis

Cómo mejorar una mezcla de tierra para cultivar cannabis

Si no has comprado una mezcla de tierra diseñada específicamente para cannabis, quizás te interese mejorar la tierra que tienes antes de empezar a cultivar. Los siguientes productos ayudan a optimizar la salud de las raíces de diversas formas, lo que permite obtener plantas más sanas y cosechas de mayor calidad.

Humus de lombriz

El humus de lombriz aporta una gran variedad de microorganismos a la tierra, promoviendo el buen crecimiento de las plantas. Además, ayuda a mejorar el drenaje y la aireación, lo que es ideal para los cultivadores que trabajan con tierras más densas, como las arcillosas.

Vermiculita

Aunque parecen bolitas de plástico, la vermiculita es un material natural. Es súper ligero y mejora la retención de agua del sustrato, contribuyendo a mantener las plantas hidratadas.

Perlita

La perlita, del mismo modo que la vermiculita, es un compuesto natural muy ligero. Sin embargo, la perlita mejora la aireación y el drenaje. Utilizada en combinación con la vermiculita, la perlita puede ayudar a conseguir la cantidad exacta de oxígeno fluyendo por el suelo.

Fibra de coco

La fibra de coco se obtiene a partir de las cáscaras de coco. También es muy material ligero y mejora la retención de agua. Algunos cultivadores incluso utilizan fibra de coco como sustrato principal, pero esto puede ser complicado y no es recomendable para principiantes.

Guijarros de arcilla

Según cómo se usen, los guijarros de arcilla pueden ayudar a drenar y retener el agua. Aunque suelen asociarse a la hidroponía, también son útiles en otros medios de cultivo.

Si se colocan en la base de la maceta, los guijarros de arcilla proporcionan un excelente drenaje y evitan que el agua se acumule, reduciendo así el riesgo de que se pudran las raíces. Y si se colocan en la parte superior, a modo de acolchado, evitan el exceso de evaporación de la parte superior del sustrato, conservando la humedad. Esto es especialmente útil si utilizas unas luces de cultivo calientes y de gran potencia.

Fertilizantes

Las plantas necesitan agua y nutrientes, igual que nosotros. El plan de fertilización variará en función de la composición del suelo, la cepa y la fase de cultivo (fase de plántula, fase vegetativa o fase de floración). Los fertilizantes de calidad vienen con instrucciones sobre cómo y cuándo es mejor utilizarlos, así como la dosificación recomendada. A la hora de fertilizar tu tierra por primera vez, asegúrate de averiguar si ya contiene nutrientes. Si es una mezcla de tierra para macetas, probablemente ya contenga nutrientes, y no querrás añadir más a un sustrato ya fertilizado.

La cantidad y la frecuencia de riego también varía en función de varios factores. Principalmente, las necesidades de las plantas irán cambiando según su edad y el tamaño de su sistema de raíces. Al principio, solo debes procurar mantener la tierra húmeda. A medida que tus plantas crezcan y empiecen a florecer, se volverán mucho más sedientas. Dicho esto, debes evitar regarlas en exceso, ya que este es uno de los problemas más habituales que pueden acabar matando a las plantas, especialmente entre cultivadores principiantes.

Como regla general, si los primeros centímetros de la tierra están secos, es buen momento para regar.

El riego y la fertilización afectarán al nivel de pH del suelo, normalmente para peor. Por tanto, tendrás que ir comprobando el pH y, en caso necesario, usar productos para subir/bajar el pH y restablecer los niveles adecuados.

Cómo hacer tu propia tierra: receta para principiantes

Si realmente quieres adentrarte en el cultivo de marihuana, hacer tu propia mezcla de tierra resulta muy gratificante, y te aportará más conocimientos sobre el proceso de cultivo. Al conocer mejor el sustrato donde crecen las plantas, aprenderás mucho más sobre las propias plantas.

Este proceso, aunque es un poco laborioso, es adecuado para cultivadores de todos los niveles. No es complicado y ofrece grandes resultados. A medida que vayas ganando un poco más de experiencia, podrás probar tus propias recetas e intentar perfeccionarlas; y un día incluso podrías hacer una súper tierra ecológica.

¿Qué necesitas?

Las siguientes medidas se indican en forma de proporciones. En primer lugar, tendrás que calcular la cantidad total de tierra que necesitas, y luego dividirla en sus componentes. Para hacer tu propia tierra, necesitarás:

  • 1 parte de vermiculita
  • 1 parte de fibra de coco
  • 2 partes de compost
  • ½-1 taza de humus de lombriz

Instrucciones

  1. Pasa el compost por un tamiz o cedazo, para eliminar los trozos más grandes. Cuanto más fino y uniforme sea, mejor.
  2. Ahora, pon en remojo la fibra de coco en agua caliente. Las instrucciones te indicarán cuál será el volumen final.
  3. En un cubo, mezcla la vermiculita con la fibra de coco remojada.
  4. Añade el compost y el humus de lombriz, y mézclalo todo para que se distribuya bien.

Cómo medir el pH de la tierra del cannabis

Ahora que has creado tu propia mezcla de tierra, estás casi a punto de empezar a cultivar. Pero, antes de plantar, debes asegurarte de que la tierra tenga un pH adecuado.

Por suerte, existen medidores de pH y no son caros. También puedes utilizar tiras o gotas, pero solo sirven para medir el pH del agua. Un medidor de pH analizará tanto el agua como la tierra, por lo que es un aparato más versátil.

Asegúrate de que tu medidor de pH esté bien calibrado y, a continuación, introdúcelo en la tierra y comprueba cuál es la lectura del pH. No te saltes este paso. Conseguir un pH óptimo en este momento hará que tu planta empiece de la mejor manera posible, ya que un pH demasiado alto o bajo le impedirá absorber los nutrientes, lo que podría causar un retraso en el crecimiento o incluso su muerte. Utilizando un producto para subir o bajar el pH, puedes ajustarlo hasta alcanzar el nivel adecuado.

¿Se puede cultivar marihuana de interior en el exterior?

¿Se puede cultivar marihuana de interior en el exterior?

Por supuesto. Muchos cultivadores empiezan el cultivo en interior, manteniendo las plántulas en un entorno muy controlado y bajo luces, y luego las trasladan al exterior cuando son un poco más robustas. Así, se aseguran de que superen la delicada fase de plántula con buena salud, para luego poder aprovechar todas las ventajas del sol durante el verano.

Otra opción es cultivar marihuana en un invernadero. Si dispones de un espacio adecuado, esta opción puede ofrecer un punto intermedio perfecto. Al poder controlar el agua e incluso la luz (usando una lona opaca), puedes aprovechar los mejores aspectos del cultivo interior y exterior.

Cultivar en tierra en interior: excelente para principiantes

Cultivar en tierra es una gran opción para los cultivadores de interior, especialmente para los principiantes. Es un medio de cultivo fiable y tolerante, capaz de dar resultados asombrosos. Algunos de los mejores cultivadores y criadores del mundo utilizan la tierra como su sustrato preferido. No todos los cultivos profesionales utilizan sistemas hidropónicos de alta tecnología.

En internet o en tiendas de jardinería, se pueden comprar mezclas de tierra con un equilibrio de nutrientes perfecto para las plantas de marihuana. Esta es una gran opción para cultivadores con poca experiencia, ya que significa que pueden centrarse en el cultivo de las plantas en lugar de preocuparse por la tierra.

Pero, para los que quieran implicarse un poco más, hacer tu propia mezcla de tierra también es una buena opción. Siguiendo los pasos anteriores, puedes crear un entorno hospitalario para tus plantas, con muy poco coste y esfuerzo. Con el tiempo, puedes utilizar este método como base para crear tus propias mezclas de súper tierra ecológica.

Sea cual sea la forma que elijas, ten por seguro que la tierra será tu amiga y la de tus plantas.

 

 

Max Sargent
Max Sargent

Max lleva varios años escribiendo sobre el cannabis y los psicodélicos. Su objetivo es ofrecer opiniones profundas e informadas sobre la marihuana, con la firme convicción de que una actitud abierta y honesta hacia las drogas y las políticas sobre drogas puede mejorar la vida de muchas personas.