El hachís se puede elaborar de distintas maneras, y el tamizado en seco es una de las más sencillas y populares. Echa un vistazo al vídeo para ver cómo se hace.
El hachís se puede hacer de muchas formas distintas, y el tamizado en seco es una de las más fáciles y populares. Lo único que necesitas para hacer hachís de esta manera es un colador fino (lo mejor es una malla de serigrafía) y mucha hierba. El hachís producido con esta técnica también se conoce como kif, kifi o kief.
El tamizado de cannabis en seco es un antiguo método de elaborar hachís originario de Marruecos. En la actualidad sigue siendo muy popular, ya que proporciona un producto de calidad muy apreciado por su potencia y facilidad para fundirse y vaporizarse.
Al frotar la hierba contra la malla, los tricomas se separan del resto del material vegetal, y únicamente la atraviesan las partículas más pequeñas. Hacer esto con grandes cantidades de marihuana lleva bastante tiempo, pero una vez que recojas el kif, comprobarás que ha merecido la pena.
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