Cómo trasplantar plantas de marihuana
Todo buen cultivador de marihuana debería dominar el arte del trasplante. Aunque se trata de una habilidad fundamental, en general es bastante sencillo. En este artículo vemos cuándo, cómo y por qué trasplantar el cannabis, y te ofrecemos una guía detallada para que el proceso sea fácil y exitoso.
Índice:
Al cultivar marihuana, normalmente hay que pasar la planta de una maceta pequeña a otra más grande, como mínimo en una ocasión. Este proceso se conoce como trasplante, y es un aspecto del cultivo de marihuana que todos los cultivadores deberían dominar.
En este artículo explicamos qué es el trasplante, así como cuándo y por qué hacerlo, y te ofrecemos unas instrucciones detalladas para trasplantar tu cannabis con éxito.
¿Qué significa trasplantar la marihuana?
Trasplantar la marihuana significa volver a plantarla en otro recipiente, es decir, moverla de una maceta a otra. Muchas plantas necesitan ser trasplantadas, especialmente las plántulas que hay que pasar a un tiesto más grande para que puedan desarrollarse. Pero el cannabis también se puede trasplantar en otras ocasiones, como por ejemplo, al trasladar las plantas de un espacio interior al exterior para que terminen de crecer (más información abajo).
A la hora de trasplantar, hay que tener en cuenta el tipo de maceta que vas a usar (en caso de que vayas a trasplantar a una maceta). Las plantas de cannabis tienen unas necesidades concretas que a menudo se satisfacen mejor con macetas de tela, que favorecen la aireación y el drenaje.
¿Por qué hay que trasplantar el cannabis?
Hay varias razones para trasplantar la marihuana, pero la principal es para garantizar que tenga un sistema de raíces sano. Al empezar el cultivo, las semillas de cannabis se germinan en macetas pequeñas para que sus raíces estén protegidas y cuidadas; un espacio pequeño permite un mayor control del entorno y reduce el riesgo de ahogar las raíces. Además, germinar en recipientes pequeños significa que estas plantas minúsculas ocupan mucho menos espacio por m² y, por tanto, necesitan menos luz que si se germinaran en el recipiente definitivo.
Pero en cuanto estas plantas empiezan a crecer, sus raíces necesitan más espacio y nutrientes. Para que una planta pueda adquirir un gran tamaño, deberá disponer de suficiente espacio bajo la tierra para extender sus raíces; de lo contrario, crecerán enredadas entre sí, la planta tendrá dificultades para desarrollarse, y las macetas podrían volcarse debido al peso de la parte aérea de la planta.
Otra razón para trasplantar el cannabis podría ser aclimatar las plantas a un entorno exterior. Muchos cultivadores siembran las semillas en interior, y luego trasladan sus plantas jóvenes al exterior, cuando las condiciones climáticas lo permiten. Por otro lado, en casos de exceso de riego o problemas con el sustrato, los cultivadores podrían trasplantar las plantas para evitar que enfermen.
¿Cuándo puede trasplantarse la marihuana?
Aunque la marihuana se puede trasplantar en muchas situaciones, hay un momento en el que casi todos los cultivadores deben hacerlo: al pasar de la fase de plántula a la fase vegetativa.
La fase de plántula empieza cuando el primer brote verde sale de la tierra, y dura unas 2-3 semanas; aunque esto es diferente en el caso de las semillas autoflorecientes (más detalles abajo). Al final de la fase de plántula, cuando las plantitas hayan desarrollado aproximadamente 4 pares de hojas verdaderas, tendrás que trasplantarlas.
Pero hay un amplio margen de tiempo para hacerlo. La clave está en asegurarse de que no sea demasiado pronto como para arriesgarse a dañar las raíces de la plántula trasplantándola a una maceta demasiado grande, ni demasiado tarde para no acabar con una bola de raíces anudadas que habrá que desenredar. Por lo general, si parece que la maceta se está quedando pequeña para la planta, es seguro trasplantarla.
Algunos cultivadores aumentan gradualmente el tamaño de las macetas de sus plantas en lugar de pasarlas directamente del recipiente de germinación al tiesto final.
Otros factores que indican cuándo trasplantar son:
- Velocidad de crecimiento: si una planta crece muy rápido, puedes trasplantarla antes de que la maceta se le quede pequeña. Algunas plantas se estiran mucho de un día para otro. Si es tu caso, podría ser hora de cambiar de maceta.
- Desarrollo de las raíces: si las raíces sobresalen por la base de la maceta, es el momento de trasplantar a otra más grande.
- Problemas de riego: la tierra retiene el agua, y las plantas consumen ese agua. Si el suelo se seca demasiado rápido, significa que hay poca tierra y demasiadas raíces, por lo que las plantas necesitarán más espacio.
¿Cuándo puedes trasplantar el cannabis al exterior?
Los cultivos de marihuana de exterior suelen empezarse en interior, pero llegará un momento en que habrá que trasplantar las plantas a sus macetas de exterior o directamente a la tierra. Normalmente, esto ocurre a principios de primavera, cuando ya han pasado las heladas. Las plántulas y las plantas jóvenes son especialmente sensibles a las olas de frío, que pueden provocar su muerte.
Las plantas que empiezan su vida en interior están acostumbradas a las condiciones cálidas y óptimas que les proporciona el cultivador, y moverlas al exterior después de esto puede provocarles un gran shock. Por tanto, es importante “aclimatarlas” antes de dejarlas definitivamente al aire libre.
Para aclimatar las plantas, tendrás que exponerlas gradualmente a su nuevo entorno; así que al principio sácalas al exterior unas horas y luego ve aumentando el tiempo que pasan fuera durante 2-3 semanas hasta que se hayan adaptado a la luz solar (especialmente a los rayos UVA y UVB). Si sigue haciendo mucho frío por las noches, deberías volver a meterlas dentro al atardecer.
Al cabo de unas semanas, las plantas deberían estar aclimatadas y ser capaces de sobrevivir en el exterior. A nivel anatómico, el proceso de aclimatación hace que las plantas se vuelvan más gruesas y robustas, y sus hojas más cerosas; estos cambios las hacen más resistentes a la humedad, el frío y el viento.
¿Se puede trasplantar la marihuana durante la floración?
En general, la marihuana no debe trasplantarse durante la fase de floración. Esto se debe a que, durante dicha fase, las plantas dedican la mayor parte de su energía al desarrollo de los cogollos. Así que, si dañas sus raíces (lo que suele ocurrir a menudo al trasplantar) podrías acabar con una cosecha más pequeña.
Cuando una planta ha empezado a florecer, no puede recuperarse de los daños del mismo modo que lo haría en la fase vegetativa, lo que podría afectar negativamente al tamaño de la cosecha final. Por tanto, no es aconsejable trasplantar la marihuana en floración, salvo que tengas un buen motivo para ello (como el exceso de riego).
¿Cuál es el mejor momento para trasplantar la marihuana: de día o de noche?
Por lo general, es mejor trasplantar cuando las plantas no están expuestas a la luz solar directa. Así que, lo más recomendable es hacerlo al final de la tarde o en días nublados. Pero dado que no podemos controlar las nubes, lo mejor es esperar al atardecer. De este modo, las plantas tendrán toda la noche para asentarse antes de volver a hacer la fotosíntesis por la mañana.
¿Se puede trasplantar la marihuana autofloreciente?
Trasplantar la marihuana autofloreciente es un poco complicado, y en general es mejor evitarlo. La razón de ello es que las autos empiezan a florecer cuando han pasado unas 3-4 semanas desde la germinación, por lo que no disponen de mucho tiempo para recuperarse de cualquier daño que hayan sufrido durante la fase vegetativa. Por tanto, dañar una planta autofloreciente al trasplantarla podría causar un crecimiento atrofiado y reducir la cosecha.
Por eso, lo mejor es sembrar las autos en sus macetas definitivas. Pero si decides trasplantarlas, hazlo temprano y con sumo cuidado.
Cómo trasplantar la marihuana
Ahora que ya sabes más sobre el trasplante, es el momento de aprender a hacerlo correctamente.
Trasplantar no es un proceso especialmente difícil, pero debe hacerse con cuidado, ya que puede tener consecuencias importantes. Si lo haces bien, tendrás unas plantas felices con cogollos gruesos y sanos. Pero, si no lo haces correctamente, podrías causar daños permanentes a tus plantas y reducir su cosecha final.
¿Cuánto espacio necesita una planta de marihuana?
Depende de la genética de la planta. Por lo general, las sativas prefieren tener mucho espacio para poder estirarse, mientras que algunas índicas se mantienen bastante compactas.
El tamaño mínimo de la maceta final no debería ser inferior a 10 litros. Este es un buen tamaño para las plantas compactas de interior y para las autoflorecientes. Si cultivas al aire libre, las macetas pueden ser más grandes; algunos cultivadores usan recipientes de 25 litros o más, ¡pero esto es solo para plantas gigantescas!
En cualquier caso, no te pases con el tamaño de la maceta. Un tiesto grande necesita más espacio y, si es grande de forma innecesaria, aumentará el riesgo de que aparezcan problemas como la podredumbre de las raíces.
Trasplantar cannabis: paso a paso
A continuación encontrarás unas instrucciones detalladas para trasplantar la marihuana.
Material
- Tierra de alta calidad
- Pala pequeña de jardinería (opcional)
- Agua
- Guantes (opcional)
- Maceta nueva
Instrucciones
- Riega dos días antes del trasplante. La tierra húmeda (pero no empapada) ayuda a separar las raíces.
- Lávate las manos o ponte guantes para evitar transferir patógenos de tus manos a la planta.
- Llena la maceta nueva con tierra. No la llenes hasta arriba y no compactes mucho la tierra, ya que la tierra comprimida atrapa el agua y el aire de una forma perjudicial para las raíces.
- Cava un agujero en el centro de la tierra para poner el cepellón de tu planta de cannabis.
- Aprieta suavemente los laterales de la maceta donde está la planta, para separar la tierra de las paredes.
- Pon la mano sobre la maceta cubriendo la tierra, de modo que el tallo de la planta quede entre tus dedos, y dale la vuelta al tiesto. Con cuidado, ve aflojando la tierra hasta extraer la planta.
- Si el cepellón es muy denso, desenreda un poco las raíces. Pero si puedes evitar tocarlas, mejor.
- Coloca la planta en el agujero inmediatamente.
- Cubre con tierra y presiona ligeramente. La tierra que quede por encima de la planta no debe estar demasiado compacta, pero una ligera presión ayudará a que la planta se asiente.
- Riega generosamente para ayudar a la planta a asentarse en su nueva maceta.
¿Se puede trasplantar el cannabis a mayor profundidad?
Si tu planta de cannabis se ha estirado demasiado, puede que quieras trasplantarla a mayor profundidad, enterrando un poco el tallo para darle mayor soporte. Por otro lado, es posible que tus plantas sean demasiado grandes para tu espacio de cultivo, y enterrarlas a mayor profundidad podría ayudar a reducir su altura.
De hecho, aunque la planta no se haya estirado demasiado, puede ser buena idea trasplantarla a mayor profundidad. Este soporte adicional ayuda a que los tallos jóvenes y débiles se vuelvan más resistentes y robustos, evitando que las plantas se rompan y se derrumben.
Para evitar que las plantas se estiren demasiado y se vuelvan larguiruchas, hay que usar un sistema de iluminación adecuado y elegir variedades con una genética compacta.
Trasplantar te ayuda a conseguir plantas más grandes y mejores
Salvo que cultives autoflorecientes, trasplantar es un paso prácticamente imprescindible del cultivo de marihuana. Si lo haces bien, obtendrás plantas sanas y enormes, capaces de producir grandes cosechas.
Pero si lo haces mal, (normalmente) tampoco supone ningún desastre. A no ser que hagas un auténtico estropicio y destroces las raíces de tus plantas, lo más probable es que se acaben recuperando. En el caso de las plantas fotoperiódicas, si sabes que les has causado algún daño ligero al trasplantarlas, puedes alargar la fase vegetativa durante 1-2 semanas más para darles tiempo a recuperarse. De este modo, ¡todavía podrás conseguir una gran cosecha! Con las variedades autoflorecientes, lo mejor es evitar por completo el trasplante, ¡así te ahorrarás trabajo!
Saber trasplantar es una de las principales habilidades que debería tener todo buen cultivador de marihuana. Así que, ¡ponte manos a la obra para dominar el arte del trasplante!