Receta de café cannábico: ¿una fusión perfecta o totalmente opuesta?

El cannabis y el café parecen totalmente opuestos. El café es estimulante mientras que el cannabis es sedante. Algunos investigadores creen que la cafeína puede realzar la potencia del colocón de marihuana, pero otros investigadores no creen que mezclarlos sea la mejor idea.

La industria cannábica está en continuo avance, impulsada por una creatividad y unas innovaciones que parecen no tener fin. Hoy en día, prácticamente cualquier plato o bebida imaginable puede ser infusionado con cannabinoides. Y esto incluye al café.

A primera vista, parece que combinar estas dos sustancias podría ser contraproducente. Sobre todo porque el café es una droga psicoactiva que puede provocar un aumento del estado de alerta gracias a sus propiedades estimulantes.

Y en cambio, el cannabis es conocido por sus efectos sedantes, relajantes y calmantes. Entonces si se combinaran ambas sustancias, ¿no provocaría que se anularan sus efectos entre sí?

Bueno, resulta que combinar estos dos apreciados estimulantes puede tener aspectos tanto positivos como negativos.

ESTUDIOS CON ANIMALES SOBRE CAFÉ Y CANNABIS

Un artículo publicado en el 2011, en la revista Behavioural Pharmacology, documentaba un estudio en el que se administraba THC y cafeína a un mono ardilla.[1] Los investigadores concluyeron que la cafeína realzaba los efectos del colocón psicoactivo catalizado por el THC. Los autores del estudio afirmaron: “Drogas como la cafeína potenciaron el efecto de dosis límites de THC, causando un efecto reforzante”.

Basándonos en este estudio con animales, podría entenderse que si combinas tus porros con una taza de café necesitarías fumar menos cannabis para poder alcanzar los mismos efectos psicoactivos. No obstante, aún existen pocas investigaciones sobre este tema, por lo que no deberías considerar esto como un hecho comprobado que puedas aplicar a tus hábitos de fumeta.

¿UNA BUENA COMBINACIÓN O UNA COSTUMBRE DAÑINA?

Parece ser que mezclar los efectos estimulantes del café con los efectos sedantes y relajantes del cannabis es un tema de debate. Algunas personas realmente disfrutan de esta combinación, pudiendo llegar a ser parte de su rutina matinal.

El Dr. Sergei Ferre, un investigador superior del National Institute on Drug Abuse, afirmó en una entrevista para Live Science que: “La cafeína aumenta enormemente los efectos de un psicoestimulante, incluyendo el THC y la cocaína”. Y añadió: “Por lo tanto, cualquier sustancia que libere dopamina, incluyendo el THC, ve sus efectos realzados por la cafeína”.[2]

Así pues, parece que la cafeína podría potenciar la efectividad del THC cuando se consumen a la vez. Se sabe que la cafeína por sí misma puede estimular la dopamina (un neurotransmisor también conocido como la hormona de la felicidad); una acción que también logra el THC. Por lo tanto, no es nada sorprendente que a tanta gente le guste combinar ambas sustancias.

Pero algunos investigadores tienen diferentes posturas sobre esta combinación y creen que a día de hoy todavía no hay suficientes estudios para poder decidir si es una combinación saludable o no.

Scott Krakower, el jefe adjunto de la unidad de psiquiatría de hospital Zucker Hillside en New Hyde Park, Nueva York, comentó a Live Science que la cafeína y el THC “se mezclarían neuroquímicamente”.[3]

Krakower afirmó que la combinación de cafeína y THC podría empeorar la memoria funcional de una persona y podría tener un efecto agravante que no sería óptimo, mencionando que los efectos de esta combinación son potencialmente perjudiciales.

RECETA PARA UN CAFÉ PSICOACTIVO

Hasta el momento la ciencia no ofrece respuestas claras, dejando que los relatos anecdóticos y personales ocupen este vacío informativo. Si eres de las personas que durante el día disfrutan fumando un porro junto con una taza de café, hay una forma de que lleves esto a un nivel superior para poder obtener ambos efectos en una sola bebida: café infusionado de marihuana.

Nota: la siguiente receta está hecha con una cantidad estimada de marihuana. Recuerda que los comestibles pueden tener un efecto mayor de lo esperado, así que no dudes en ajustar las cantidades según tu experiencia. Es altamente recomendable que primero aprendas a calcular la potencia de los alimentos cannábicos.

Ingredientes:

• 3 tazas de agua
• Tu café favorito
• Mantequilla o aceite de coco
• ½ gramo de tu variedad de cannabis favorita

Preparación:

Para empezar, muele el cannabis lo más finamente posible. Para esto, lo mejor es usar un grinder de varios compartimentos, ya que la planta se va filtrando y volviendo más fina a medida que atraviesa las diferentes partes. Otra opción posible es usar unas tijeras bien afiladas. Cuanto más pequeñas sean las partículas, mayor superficie quedará expuesta.

A continuación, vierte las 3 tazas de agua en una olla y llévala al punto de ebullición.

Ahora, añade al agua 2 cucharadas de mantequilla o de aceite de coco, según tu elección. Tanto la mantequilla como el aceite de coco son grandes fuentes de grasa, y dado que cannabinoides como el THC y el CBD son liposolubles, estas fuentes de grasa son necesarias para poder absorber los cannabinoides.

El siguiente paso es añadir la marihuana molida a la olla.

Deja que la mezcla hierva durante aproximadamente 40 minutos, activando así la extracción de los cannabinoides al líquido. Remueve la mezcla de vez en cuando.

Para colar la mezcla a otro recipiente, usa un colador fino o una muselina. Deja que el líquido se filtre mientras que los restos vegetales quedan retenidos en el colador o tela.

El líquido obtenido puede usarse para potenciar el café. Usa una batidora para poder mezclar el café y evitar que la grasa suba y quede flotando en la taza.

Puedes añadir vainilla o miel a tu gusto.

¡Que lo disfrutes!