El protocolo de la marihuana: qué hacer y qué no hacer
Existen reglas en la cultura del fumeta, o algo así. Si quieres evitar momentos embarazosos, ¡trata de seguir las reglas del protocolo de la marihuana!
Existen ciertas reglas de la cultura fumeta que se deben respetar. De lo contrario, te darás cuenta de que comienzas a coger mala fama entre tus "colegas". ¿Y qué hay de bueno en eso? El cannabis es más divertido si es compartido.
El tema es que la mayor parte de esas reglas no están escritas. Para evitar pifias y momentos embarazosos, trata de seguir estas indicaciones generales. Al menos te asegurarás de que te vuelvan a invitar, ¿contento?
Así que aquí vamos, con las reglas básicas del protocolo de la marihuana:
TRAE ALGO DE TU ALIJO PARA COMPARTIR
Quizás te vayas de rositas una vez si no has llevado nada. A lo mejor incluso un par de veces. Sin embargo, de acuerdo a la etiqueta del fumeta, si conviertes esto en un hábito es porque eres un gorrón egoísta. Tu madre, el gato y otras excusas baratas ya no valen. Si realmente no puedes conseguir nada, entonces al menos ofrece contribuir económicamente. La hierba no es barata en ningún sitio.
LIMPIA TU HIERBA
A menos que estés planeando meterte en la cultura cannábica, no guardes las semillas. Lo más probable es que ni siquiera sean buenas. Y cuando las fumas, saben fatal. Además pueden provocar chispazos en las pipas de agua.
OFRECE A LOS INVITADOS LA PRIMERA CALADA
Esto se puede poner peliagudo, pero usa el sentido común. Si tienes invitados y es tu hierba, ofrécesela. Si eres el que dispone de la hierba pero te encuentras en la casa de otra persona, ofréceles también la primera calada. Si lías la hierba de otra persona, deja que lo encienda alguien más. La moraleja del asunto es que si estás en disposición de ser el primero en fumar, ofréceselo a alguien antes. Protocolo básico de la hierba.
PASA EL CANUTO
"Pass the Dutchie" es una canción de reggae pegadiza, pero en este caso significa algo más. En círculos de fumeteo establecidos, los porros se pasan de forma continua en círculo. En otras palabras, hacia la izquierda. También se podría hacer hacia la derecha, pero el asunto consiste en establecer una rutina y cumplirla.
RECONOCE QUE ESTÁS ENFERMO Y ERES CONTAGIOSO
O al menos resfriado. Compartir un porro con una bola de virus contagiosa va en contra del sentido de una comunidad que comparte. Si estás demasiado enfermo como para compartir, simplemente lía uno para ti y explica por qué. Todo el mundo te entenderá y no pensará que estás siendo egoísta. En especial si cedes parte de tu hierba para la fumada en común.
PREGUNTA SOBRE EL TABACO
Algunas personas mezclan la hierba con otras sustancias, incluida el tabaco. Si te encuentras en un grupo en el que esto podría suponer un problema, coméntalo. La mayoría de los círculos no tendrán problemas. O tal vez debas considerar adoptar su tradición, de ti depende.
SÉ EDUCADO
Lo mejor de los círculos de fumar es que acabas conociendo a nuevas personas, incluso si no te caen bien después de dos minutos. No tienes por qué resolver los problemas del mundo, pero a ambos os gusta la hierba. Eso debería dar lugar a, como mínimo, buenas formas. Lo mejor de esta planta es que, gracias a ella, es mucho más fácil dejarse llevar, ¿cierto?
RESPETA LAS TRADICIONES DE OTROS GRUPOS
Si te acabas de unir a un nuevo círculo, debes aceptar que es posible que hagan las cosas de manera diferente. Algunas otras costumbres, como la de quien lo lía, lo enciende, se suele cumplir de forma religiosa. Pese a ello, si se te ocurre cualquier forma de ser más educado, siéntete libre para experimentar. Pero las reglas de la casa son las que mandan, siempre.
RESPETA LA PRIVACIDAD
Si eres un novato, o incluso alguien habitual en un círculo de fumadores, esta es una práctica genial. Y este el siguiente paso que deberías recordar. Si quieres compartir la experiencia, hazlo con sensatez. En otras palabras, no compartas fotos de ello en ninguna de tus cuentas en las redes sociales. Hay mucha gente que no va aireando por ahí que consume hierba. No tienes derecho a publicitarlo por ellos, y hacerlo podría fácilmente costarle a alguien su trabajo.
Tampoco muestres comportamientos que podrían poner en peligro a alguien de tu grupo o grupos, como por ejemplo discutir lo que sucede en un círculo de fumar en cualquier red pública o incluso por mensajería. Recuerda que, lo que sucede en un círculo de fumeteo, se queda en el círculo de fumeteo.
NO INSISTAS A ALGUIEN PARA QUE SE UNA
La hierba es genial, una deidad para algunos. O al menos una parte bastante genial de la "salvación". Pero he aquí el tema, que cada uno hace las cosas a su ritmo. No debes "evangelizar" a nadie en el consumo de marihuana. Te convertirás en una persona muy cansina si insistes en que fume alguien que no lo hace. No los presiones, es su propia elección personal. La presión en grupo no está bien.
NO TE PASES CON LA CAZOLETA
La mejor calada, es una calada de verde. Trata de quemar tan solo una pequeña superficie de la cazoleta cuando te lo ofrezcan, de forma que otros puedan disfrutar de una experiencia similar.
NO BABEES EL PORRO
Promueve el uso de filtros para facilitar las cosas al principio. Sin embargo, ten cuidado y sé consciente de cómo y dónde tocas el canuto con tus labios. Si la flema de otras personas te resulta asquerosa, la tuya también lo es.
NO APALANQUES EL PORRO O PASES UNA CAZOLETA CONSUMIDA
Ambas prácticas arruinan la etiqueta por igual, y además tienen muchos puntos en común entre sí. Apalancar un porro significa aferrarte a él más de lo que deberías. Dale una calada o dos y pásalo. Por muy buena que sea la historia que estás contando, seguro que es mejor si todo el mundo está en la misma onda. La única excepción a esta práctica es si eres el último en recibir un tiro decente de una pipa que ya ha estado rulando. Si eres la última persona en recibirla, reconócelo y devuélvele la pipa a su dueño.
Cuando estés en una situación en la que se están pasando porros, pregunta antes de terminar un petardo quemado. Nunca se sabe, podrías dejar a alguien sin una buena chusta. O ponlo en una cazoleta. Pase lo que pase, no tires lo que haya.
NO SUELTES EL HUMO EN LA CARA DE ALGUIEN
Está tan mal que no debería hacer falta ni decirlo. Disfrutar de la hierba es un evento alegre e intencionado. ¿Qué necesidad hay entonces? Siguiendo en esta línea, no exhales en la cara de ningún animal. No solo no lo disfrutan, sino que además les podrías estar causando algún tipo de daño.